Literatura
Poesía
marzo 2024
Poemas de Aníbal Retamal Vásquez
La noche que tanto mira y esconde
A la violada y al suicida
En estos campos la noche ha sido testigo de la muerte y de la sangre.
Lágrimas se derraman y caen al oscuro de la noche que tanto mira.
Bajo estas realidades las gentes escapan y no vuelven por el bagaje.
La noche ha visto violaciones y ha escuchado llantos callados
y al límite del barranco ha arropado a los desdichados.
La noche que tanto mira y esconde en su silencio te grita.
El río se vuelve a la oscuridad y vacío se vuelve,
y no tardará mucho para que otro clavo se deje llevar por lo leve.
Oh, querida noche, que todo cubres y oscureces,
deja que tu oscuridad sea su sudario.
Amada oscuridad, blanquea su piel de todo pecado y murmullo.
Amada, noche mía, abraza a la violada, al suicida, al que está solo.
No dejes que de este mundo se vaya de este modo.
Noche, a tu cielo nocturno imploro:
deja que el baleado descanse
y que nunca calle el que enterrado está bajo este hogar.
Pronto la noche hablará.
Poemario de sangre
Para todo joven poeta.
En cada pluma hay elixir de vida
y este es sembrado en piel blanca que no olvida.
En cada siembra hay infinidad de dolores.
Lágrimas en montones y miles de olores.
El poeta se marcha, lento, dejando su siembra sola.
El poeta se marcha, exento de cuidado y riego; en este páramo hay muchas olas.
Tiempo luego, vuelve, camina lento hacia su razón que lo envuelve.
Lo cubre la sombra de su dolor madurado
y lo empapa su llanto antiguo y lejano superado.
Ve su árbol de dolores, lágrimas y olores crecido.
Ahora siente ternura cuando ve los folios de su árbol doloroso.
A los pies de este árbol que vive, yace muerto el poeta enraizado en su árbol que llora.
Aníbal Retamal Vásquez, nacido el treinta de agosto del dos mil siete, es un joven poeta que empezó a componer sus primeros versos a los nueve años. Movido por una sensibilidad que lo cala hasta los huesos, escribe sus ideas y plasma en versos sus pensamientos. Pendiente de todo lo que ocurre en lo artístico en Puerto Aysén, ha conocido a mucha gente del rubro de preservación cultural, asistiendo a talleres, peñas y obras de teatro. Ha recitado poemas en centros culturales, recibiendo halagos de gentes ya consolidadas. Sigue escribiendo y creando, algo que lo mantiene vivo.