Literatura
Artículo literario/Publicación digital
Diciembre 2020
Latitud Leteo: agua, olvido y memoria, por María Negro
Leteo es el nombre del río del olvido, dicen, como si olvidar fuera posible.
¿O sí?
La construcción de la memoria nos preocupa, porque nos preocupa el olvido como espacio de pérdida. Los griegos situaron al Leteo en el Hades, el Dante ubicó su origen en el Paraíso mismo y los chinos la concibieron como una señora.
Agua o mujer, el olvido que bebemos, también, nos ampara.
Latitud Leteo se presenta como el vaso inquieto que alcanza el olvido, como si olvidar fuera posible.
¿O sí?
El desprestigio que cargan algunos verbos, a veces, pueden ser salvos al alcanzar la altura de la poesía. Educados para recordar, corremos el serio riesgo de ser los nuevos Funes borgeanos, repitiendo palabras huecas como si tuvieran sentido. La certeza se asienta sobre la memoria, ignorando que la memoria es, a su vez, un olvido reconstruido.
Para dudar necesitamos, también, el olvido de lo impuesto como verdad que nos ata los pies haciéndonos creer que ese rodar sobre nosotros lleva el nombre de libertad.
Sobre esta pequeña isla que es el alma, Latitud Leteo provoca desde su nombre. Nos obliga a pensar sobre el sentido de la palabra, en tiempos donde la acumulación de palabras parecieran provocar todo lo contrario. Una revista que trae en su propio cauce la reflexión, la observación delicada de grandes autores, un espacio dedicado exclusivamente a la pregunta y el Memento, no como desafío del Leteo, sino como parte integral del mismo río.
Christian Kupchik, poeta periodista traductor, nos presenta esta propuesta de olvido y memoria, de pregunta, de duda, de acercamiento a las otras conclusiones, las que podremos hacer nosotros mismos, en una apuesta fuerte hacia la intervención del lector como elemento imprescindible en la construcción literaria.
Una revista virtual, nacida en tiempos de pandemia. El año que todos parecemos desear que quede pronto en el olvido, Latitud Leteo nos brinda la posibilidad de jugar dentro de la rayuela dialéctica.
Olvidamos para recordar mejor. Recordamos, para descansar en las aguas el peso profundo de la memoria.
Bienvenida sea la Latitud que nos cuestiona y nos cobija.
www.latitudleteo.com